martes, 16 de octubre de 2018

Rasgos de sangre

                      Capitulo 10.- 
                      Revelaciones.
El inmenso tornado creado por Shoen comenzó a arrazar con la base elemental.
Hasuka fue arrastrada por las fuertes corrientes de aire creadas por el tornado, y un árbol que también se encontraba girando entre los escombros la golpeó en la cabeza y aunque tenía puesto su casco el golpe la había dejado inconsciente.
Arturo vio a Hasuka entre los escombros que giraban violentamente al rededor de ella, pero antes de que se transportara Ross lo tomó de la armadura.
Ambos quedaron a centímetros de Hasuka, sin embargó las fuertes corrientes no les permitieron tomarla, y los escombros que se encontraban volando junto a las fuertes ráfagas de viento eran demasiado peligrosos, así que Ross volvió su cuerpo pesado para intentar escapar del tornado, sin embargo no funcionó. La fuerza que ejercía el viento sobre ellos era bastante pero Arturo no quería regresar a tierra firme sin  Hasuka.
- Debemos volver Arturo, o termináremos muertos.
- No puedo regresar sin Hasuka. Lo siento Ross.
En ese momento Wood llegó al campo de batalla, y creó un par de raíces de árbol enormes, que salieron desde el suelo e intentaron frenar el violento tornado, pero no  tuvo resultado. Se dirigió lo más rápido que pudo hacia la ciudad, y se encontró con Waldrius.
- Voy a necesitar tu ayuda Waldrius, si ese tornado no es detenido ahora morirán muchos soldados elementales y civiles.
¿En qué estaría pensando Shoen al crearlo tan cerca de la ciudad.
- Rey Wood, el general Shoen fue herido en batalla, creó ese tornado como método de distracción para escapar y ayudar a evacuar a los ciudadanos de Mandrágora, pero el tornado tomó el rubo contrario y viene directo a la ciudad. Ni siquiera Grant pudo detenerlo.
- Pero tu y yo si. Usaré el dios árbol.
- Pero su majestad, esa técnica requiere mucha energía y solo puede usarla por 10 minutos, ¿en realidad la usará?
- Si, es necesario detener ese tornado o podríamos no ser capaces de evacuar a los ciudadanos. Waldrius, crea el agua necesaria para hacer crecer al dios árbol. Necesito 400 litros de agua.
- Eso es demasiado, ni siquiera yo puedo proveer tanta agua. Pero quizá si todos los elementales de agua ayudamos podríamos lograrlo.
Todos los soldados elementales que tuvieran rasgos sanguíneos de agua fueron llamados para ayudar a Wood, y después de proveer tanta agua como pudieron, Wood comenzó a crear un árbol enorme, solo una de sus raíces se extendía 1 kilometro.
De inmediato todo el suelo comenzó a volverse cenizo, pues para crear a semejante monstruo de madera Wood dejaba infértil para siempre el suelo donde el dios árbol nacía.
Un enorme árbol creció en medio de la base militar elemental, su tamaño era de 900 metros de alto y todos los enormes robles y pinos que rodeaban el lugar se adherían a él.
Su forma era como la de un golem (humanoide) y Wood usando todas sus emergías provenientes del agua, el sol y los nutrientes del suelo, comenzó a darle forma y moverlo poco a poco, hasta que se encontró de frente con el gigantesco tornado.
- Maldicion Arturo, si no salimos de aquí moriremos. ¡Solo mira el tamaño de esa cosa! Si no regresamos a tierra firme la colisión nos matara.
- Olvidalo Ross, no debiste seguirme si no estabas dispuesto a arriesgarte y ayudar.
-  Lo siento Arturo, pero no podemos seguir aquí.
Ross golpeó a Arturo tan fuerte que lo desmayó y después de hacerlo se impulsó sobre los escombros y se volvió tan pesado como media   tonelada, gracias a su impulso y peso logró escapar de las corrientes de aire, pero no lo había pensado muy bien.
Estaban tan alto que si no morían por los escbros lo harían por la caída, no importaba cuán ligero o pesado se volviera Ross, la altura era demasíada para sobrevivir a la caída.
El dios árbol golpeó con sus gruesas ramas el tornado, y la colisión reventó con tanta fuerza que la onda de viento generada lanzó aún con más fuerza a Ross y Arturo, quien afortunadamente despertó gracias a la brusca sacudida, y justo a tiempo para transportarse al suelo firme, aunque aún llevaban inercia por la presión generada por la onda expansiva del viento, y sus cuerpos golpearon bruscamente el suelo, fracturando así la pierna derecha de Ross y el brazo izquierdo de Arturo.
Todo quedó devastado , pero increíblemente gran parte del dios árbol seguía en pié, y para la desgracia de Chibiko, Wood lo había logrado ver y se dispuso a atacarlo con lo ultimo que le quedaba de fuerza, pronto el general Tomyer intento intervenir, pero no fue posible pues Grant al entender el objetivo de Wood  detuvo a Tomyer.
Chibiko estaba tan agotado y débil que apenas podia moverse. El impacto de las gruesas ramas del gigantesco árbol levantaron polvo, y escombros por doquier, dejando una visibilidad nula por unos minutos.
La evacuación de Mandrágora fue un éxito. Después de haber usado todo su poder Wood había quedado inconsciente, él dios árbol había sido redusido por la fuerza del impacto de sus ramas contra el suelo y todo el pueblo elemental que residía en está ciudad se marchó hacia la profundidad del bosque.
El impacto del golpe del dios árbol había dejado un gran cráter y Chibiko increíblemente se las había arreglado para no ser  golpeado de lleno, pero estaba tan cerca del impacto que con la onda de choque todos sus huesos habían sido triturados.
Holow corrió hacia el cuerpo de Chibiko, el cual estaba bañado en sangre, pues parte de la madera del árbol que se había desprendido en el impacto le había hecho grabes heridas.
- ¡Chibiko!
Las lágrimas brotaron de los ojos de Holow, después de todo la misión había fracasado.
- Holow.- comenzó a hablar Chibiko mientras tosía sangre por las heridas internas de su cuerpo.
- No digas nada Chibiko, te sacaremos de aquí.
- No Holow, escucha, los elementales creen que destruiremos el planeta, pero la realidad es que esa idea les fue implantada, ellos son solo una marioneta de un ser diabólico superior. - Chibiko apenas podía hablar, tosía sangre sin parar y se notaba que luchaba por no morir aún. - no se detendrán Holow, ellos no se rendirán hasta exterminar a la raza morfologa, a menos que detengan...
- ¡CHIBIKO!...
Chibiko había muerto, sin poder dar el mensaje completo a Holow. El desgarrador grito por la perdida de un compañero inigualable resonaba entre el caos que había quedado después de la batalla más intensa en lo que llevaba la guerra entre razas.
Los escombros y heridos llenaban por completo el panorama, el equipo medico no se daba abasto, por lo cual todos los soldados que aún seguían en pié y podían caminar aún, partieron hacia Clandintom con el objetivo de pedir refuerzos para tratar y trasladar a los heridos.
Arturo solo tenía un brazo roto de modo que podía caminar, y Ross por su  parte fue capaz de caminar usando su pierna izquierda y apoyándose en Holow.
- Hiciste bien sargento. - le dijo Holow a Ross. - si no hubieras sacado de ahí a Arturo estuviera muerto ahora, un brazo roto y una pierna rota son nada comparado con lo que les habría sucedido de haberse quedado.
- Tal vez tenga razón coronel, pero Arturo no lo ve así. Para el salvar la vida de Hasuka significaba más de lo que cree. Ella lo salvó en el pasado y por ello perdió su pierna y no pudo seguir combatiendo, eso hizo que se sintiera culpable por no haber ayudado al teniente Butter quien murió en aquella ocasión.
- Entiendo Ross, el sargento Arturo se siente culpable y ahora se sentirá peor.
Pero no puedes hacer nada por ahora, ya lo superará. En la guerra las perdidas personales son lo cotidiano y con el tiempo uno comienza a acostumbrarse, salvar una vida es lo mejor que se puede hacer en un campo de batalla.
Propondré a Draydur Arturo y a tí para un ascenso. Preocuparse por los demás es una cualidad que todo soldado debe tener y más aún cuando se tienen vidas a tu cargo, y en el caso de Arturo, es más que necesario que entienda que no importa cuanto lo desees, siempre habrán vidas que no se podrán salvar.
Chibiko es la prueba de ello, aun a pesar de todos los esfuerzos no conseguimos salvarlo.
Sin embargo la misión no ha sido un fracaso, por el contrario se logró tomar el puerto de Clandintom y la ciudad de Mandrágora a pesar de que quedó en ruinas por la batalla.
- Es cierto coronel, la muerte de nuestros compañeros no será en vano.
- Es verdad, pero me preocupan las últimas palabras de Chibiko.
La verdad se esforzó mucho para advertirnos. Por sus heridas me sorprende que pudiera hablar incluso, no puedo imaginar la magnitud de la responsabilidad que sintió para esforzarse tanto en seguir viviendo solo para decir eso.
- ¿Qué le dijo coronel?
- Lo siento sargento, se me ha ido la lengua. No es algo que deba decir por ahora, lo mejor será tratarlo directamente con la mesa estratégica.
(Nombre que recibían las reuniones con los generales y coroneles, como la que se había tenido para efectuar el reciente ataque a Mandrágora).
- Por cierto sargento Ross... Respecto a la sargento Hasuka, escuché que su habilidad es la regeneración; probablemente se encuentre con vida.
- Eso esperaría Coronel Holow, pero usted vio la fuerza de la colisión entre el tornado y el árbol gigantesco creado por Wood, y aunque esperó realmente que se encuentre bien, no ha sido encontrada entre los soldados heridos.
- Tal vez se encuentre debajo de los escombros, no hay que perder las esperanzas sargento.
Al llegar a Clandintom todos los heridos fueron trasladados a la enfermería, el segundo general ya había partido junto a la mayoría de los soldados hacía Tarot para informar el éxito de la captura de ambas bases y ciudades enemigas, así como también trasladar a los prisioneros y entregar el cuerpo de Chibiko para que recibiera los honores como soldado morfologo.
"La sargento Sarat estará devastada cuando sepa que su esposo murió, y ni hablar de su hijo", dijo Dayron quien se encontraba en cama en la enfermería de Clandintom.
Ross y sus compañeros no tenían ni idea de que Chibiko y Sarat tuvieran una relación, y mucho menos sabían de la existencia de su hijo, por lo que las palabras dichas por Dayron les habian sorprendido bastante.
Dos días después de lo sucedido en Mandrágora los cadáveres y los heridos seguían siendo encontrados entre los restos y escombros de la batalla, sin embargo seguía sin haber noticia alguna de Hasuka, tal parecía que se había hecho añicos en la colisión.
Mientras Arturo buscaba entre los recién llegados a la enfermería a Hasuka, Ross se acercó a él para conversar.
- Arturo, de verdad lo siento pero no habríamos salido con vida si no hubiera hecho lo que hice.
- Callate, no te golpeo sólo porque no estamos en condiciones.
Pero escucha bien, nunca te perdonaré que me hayas salvado, habría preferido morir a que me volvieran a salvar a costa de alguien más.
- Pero Arturo...
- ¡Que te calles! Si no fuera por ti, quizá la habría podido salvar. Solo eres un idiota que se cree el héroe. - Ross se quedó callado con la cabeza mirando al suelo. - en primer lugar, ¿para que te enlistaste en el ejército? ¿Te gusta ser un héroe que lucha por la justicia?
Eres idiota si crees que los héroes pueden sobrevivir en la guerra.
Arturo comenzó a caminar pero en ese momento Ross respondió a su pregunta.
-Mis padres no me criaron juntos, mi padre murió por una enfermedad en el corazón cuando yo tenía 5 años, y dejó a mi madre, a mi hermano y a mí.
En aquel entonces yo me fui a trabajar de leñador con mi abuelo, y mi madre y mi hermano pequeño tuvieron que quedarse solos mientras yo trabajaba.
- ¿A caso crees que me interesa realmente?
- durante los primeros ataque que hicieron los elementales antes de iniciar la guerra mi madre y mi hermano fueron asesinados. - Arturo guardó silencio pero no volteo a ver a Ross. - en ese entonces decidí que sería militar.
Hace 9 meses cuando la guerra entre ambas razas comenzó decidí que me enlistaria para vengar a mi madre y mi hermano.
- Si crees que por una historia triste voy a olvidar todo estás muy equivocado.
Arturo siguió caminando sin voltear atrás. Sabía que lo que Ross le había dicho debía ser la verdad, y a diferencia de él, Arturo se había enlistado en el ejercito morfologo sólo porque su padre y él tenían problemas, lo había hecho como una salida, además de que creía que con sus habilidades sería un soldado sin igual, pues nadie de su familia se encontraba en el ejército, lo que significaba que Solo él tendría una habilidad tan increíble como lo era poder teletransportarse.
Pero la guerra le había hecho ver que no importaba si su habilidad era excepcional, siempre hay alguien mejor. A pesar de ser tan veloz, fuerte o inteligente comparado con lo que había visto y vivido hasta ahora, Arturo sentía que no era nada, y además lo habían salvado dos veces de la muerte, no solo era una deuda enorme la que sentía que tenía con Hasuka y  ahora también con Ross, sino que además se sentía culpable por ser "débil" y no poder salvarse ni siquiera el mismo.
Hasta aquí el capitulo de está semana.
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