martes, 16 de octubre de 2018

Rasgos de sangre

                      Capitulo 10.- 
                      Revelaciones.
El inmenso tornado creado por Shoen comenzó a arrazar con la base elemental.
Hasuka fue arrastrada por las fuertes corrientes de aire creadas por el tornado, y un árbol que también se encontraba girando entre los escombros la golpeó en la cabeza y aunque tenía puesto su casco el golpe la había dejado inconsciente.
Arturo vio a Hasuka entre los escombros que giraban violentamente al rededor de ella, pero antes de que se transportara Ross lo tomó de la armadura.
Ambos quedaron a centímetros de Hasuka, sin embargó las fuertes corrientes no les permitieron tomarla, y los escombros que se encontraban volando junto a las fuertes ráfagas de viento eran demasiado peligrosos, así que Ross volvió su cuerpo pesado para intentar escapar del tornado, sin embargo no funcionó. La fuerza que ejercía el viento sobre ellos era bastante pero Arturo no quería regresar a tierra firme sin  Hasuka.
- Debemos volver Arturo, o termináremos muertos.
- No puedo regresar sin Hasuka. Lo siento Ross.
En ese momento Wood llegó al campo de batalla, y creó un par de raíces de árbol enormes, que salieron desde el suelo e intentaron frenar el violento tornado, pero no  tuvo resultado. Se dirigió lo más rápido que pudo hacia la ciudad, y se encontró con Waldrius.
- Voy a necesitar tu ayuda Waldrius, si ese tornado no es detenido ahora morirán muchos soldados elementales y civiles.
¿En qué estaría pensando Shoen al crearlo tan cerca de la ciudad.
- Rey Wood, el general Shoen fue herido en batalla, creó ese tornado como método de distracción para escapar y ayudar a evacuar a los ciudadanos de Mandrágora, pero el tornado tomó el rubo contrario y viene directo a la ciudad. Ni siquiera Grant pudo detenerlo.
- Pero tu y yo si. Usaré el dios árbol.
- Pero su majestad, esa técnica requiere mucha energía y solo puede usarla por 10 minutos, ¿en realidad la usará?
- Si, es necesario detener ese tornado o podríamos no ser capaces de evacuar a los ciudadanos. Waldrius, crea el agua necesaria para hacer crecer al dios árbol. Necesito 400 litros de agua.
- Eso es demasiado, ni siquiera yo puedo proveer tanta agua. Pero quizá si todos los elementales de agua ayudamos podríamos lograrlo.
Todos los soldados elementales que tuvieran rasgos sanguíneos de agua fueron llamados para ayudar a Wood, y después de proveer tanta agua como pudieron, Wood comenzó a crear un árbol enorme, solo una de sus raíces se extendía 1 kilometro.
De inmediato todo el suelo comenzó a volverse cenizo, pues para crear a semejante monstruo de madera Wood dejaba infértil para siempre el suelo donde el dios árbol nacía.
Un enorme árbol creció en medio de la base militar elemental, su tamaño era de 900 metros de alto y todos los enormes robles y pinos que rodeaban el lugar se adherían a él.
Su forma era como la de un golem (humanoide) y Wood usando todas sus emergías provenientes del agua, el sol y los nutrientes del suelo, comenzó a darle forma y moverlo poco a poco, hasta que se encontró de frente con el gigantesco tornado.
- Maldicion Arturo, si no salimos de aquí moriremos. ¡Solo mira el tamaño de esa cosa! Si no regresamos a tierra firme la colisión nos matara.
- Olvidalo Ross, no debiste seguirme si no estabas dispuesto a arriesgarte y ayudar.
-  Lo siento Arturo, pero no podemos seguir aquí.
Ross golpeó a Arturo tan fuerte que lo desmayó y después de hacerlo se impulsó sobre los escombros y se volvió tan pesado como media   tonelada, gracias a su impulso y peso logró escapar de las corrientes de aire, pero no lo había pensado muy bien.
Estaban tan alto que si no morían por los escbros lo harían por la caída, no importaba cuán ligero o pesado se volviera Ross, la altura era demasíada para sobrevivir a la caída.
El dios árbol golpeó con sus gruesas ramas el tornado, y la colisión reventó con tanta fuerza que la onda de viento generada lanzó aún con más fuerza a Ross y Arturo, quien afortunadamente despertó gracias a la brusca sacudida, y justo a tiempo para transportarse al suelo firme, aunque aún llevaban inercia por la presión generada por la onda expansiva del viento, y sus cuerpos golpearon bruscamente el suelo, fracturando así la pierna derecha de Ross y el brazo izquierdo de Arturo.
Todo quedó devastado , pero increíblemente gran parte del dios árbol seguía en pié, y para la desgracia de Chibiko, Wood lo había logrado ver y se dispuso a atacarlo con lo ultimo que le quedaba de fuerza, pronto el general Tomyer intento intervenir, pero no fue posible pues Grant al entender el objetivo de Wood  detuvo a Tomyer.
Chibiko estaba tan agotado y débil que apenas podia moverse. El impacto de las gruesas ramas del gigantesco árbol levantaron polvo, y escombros por doquier, dejando una visibilidad nula por unos minutos.
La evacuación de Mandrágora fue un éxito. Después de haber usado todo su poder Wood había quedado inconsciente, él dios árbol había sido redusido por la fuerza del impacto de sus ramas contra el suelo y todo el pueblo elemental que residía en está ciudad se marchó hacia la profundidad del bosque.
El impacto del golpe del dios árbol había dejado un gran cráter y Chibiko increíblemente se las había arreglado para no ser  golpeado de lleno, pero estaba tan cerca del impacto que con la onda de choque todos sus huesos habían sido triturados.
Holow corrió hacia el cuerpo de Chibiko, el cual estaba bañado en sangre, pues parte de la madera del árbol que se había desprendido en el impacto le había hecho grabes heridas.
- ¡Chibiko!
Las lágrimas brotaron de los ojos de Holow, después de todo la misión había fracasado.
- Holow.- comenzó a hablar Chibiko mientras tosía sangre por las heridas internas de su cuerpo.
- No digas nada Chibiko, te sacaremos de aquí.
- No Holow, escucha, los elementales creen que destruiremos el planeta, pero la realidad es que esa idea les fue implantada, ellos son solo una marioneta de un ser diabólico superior. - Chibiko apenas podía hablar, tosía sangre sin parar y se notaba que luchaba por no morir aún. - no se detendrán Holow, ellos no se rendirán hasta exterminar a la raza morfologa, a menos que detengan...
- ¡CHIBIKO!...
Chibiko había muerto, sin poder dar el mensaje completo a Holow. El desgarrador grito por la perdida de un compañero inigualable resonaba entre el caos que había quedado después de la batalla más intensa en lo que llevaba la guerra entre razas.
Los escombros y heridos llenaban por completo el panorama, el equipo medico no se daba abasto, por lo cual todos los soldados que aún seguían en pié y podían caminar aún, partieron hacia Clandintom con el objetivo de pedir refuerzos para tratar y trasladar a los heridos.
Arturo solo tenía un brazo roto de modo que podía caminar, y Ross por su  parte fue capaz de caminar usando su pierna izquierda y apoyándose en Holow.
- Hiciste bien sargento. - le dijo Holow a Ross. - si no hubieras sacado de ahí a Arturo estuviera muerto ahora, un brazo roto y una pierna rota son nada comparado con lo que les habría sucedido de haberse quedado.
- Tal vez tenga razón coronel, pero Arturo no lo ve así. Para el salvar la vida de Hasuka significaba más de lo que cree. Ella lo salvó en el pasado y por ello perdió su pierna y no pudo seguir combatiendo, eso hizo que se sintiera culpable por no haber ayudado al teniente Butter quien murió en aquella ocasión.
- Entiendo Ross, el sargento Arturo se siente culpable y ahora se sentirá peor.
Pero no puedes hacer nada por ahora, ya lo superará. En la guerra las perdidas personales son lo cotidiano y con el tiempo uno comienza a acostumbrarse, salvar una vida es lo mejor que se puede hacer en un campo de batalla.
Propondré a Draydur Arturo y a tí para un ascenso. Preocuparse por los demás es una cualidad que todo soldado debe tener y más aún cuando se tienen vidas a tu cargo, y en el caso de Arturo, es más que necesario que entienda que no importa cuanto lo desees, siempre habrán vidas que no se podrán salvar.
Chibiko es la prueba de ello, aun a pesar de todos los esfuerzos no conseguimos salvarlo.
Sin embargo la misión no ha sido un fracaso, por el contrario se logró tomar el puerto de Clandintom y la ciudad de Mandrágora a pesar de que quedó en ruinas por la batalla.
- Es cierto coronel, la muerte de nuestros compañeros no será en vano.
- Es verdad, pero me preocupan las últimas palabras de Chibiko.
La verdad se esforzó mucho para advertirnos. Por sus heridas me sorprende que pudiera hablar incluso, no puedo imaginar la magnitud de la responsabilidad que sintió para esforzarse tanto en seguir viviendo solo para decir eso.
- ¿Qué le dijo coronel?
- Lo siento sargento, se me ha ido la lengua. No es algo que deba decir por ahora, lo mejor será tratarlo directamente con la mesa estratégica.
(Nombre que recibían las reuniones con los generales y coroneles, como la que se había tenido para efectuar el reciente ataque a Mandrágora).
- Por cierto sargento Ross... Respecto a la sargento Hasuka, escuché que su habilidad es la regeneración; probablemente se encuentre con vida.
- Eso esperaría Coronel Holow, pero usted vio la fuerza de la colisión entre el tornado y el árbol gigantesco creado por Wood, y aunque esperó realmente que se encuentre bien, no ha sido encontrada entre los soldados heridos.
- Tal vez se encuentre debajo de los escombros, no hay que perder las esperanzas sargento.
Al llegar a Clandintom todos los heridos fueron trasladados a la enfermería, el segundo general ya había partido junto a la mayoría de los soldados hacía Tarot para informar el éxito de la captura de ambas bases y ciudades enemigas, así como también trasladar a los prisioneros y entregar el cuerpo de Chibiko para que recibiera los honores como soldado morfologo.
"La sargento Sarat estará devastada cuando sepa que su esposo murió, y ni hablar de su hijo", dijo Dayron quien se encontraba en cama en la enfermería de Clandintom.
Ross y sus compañeros no tenían ni idea de que Chibiko y Sarat tuvieran una relación, y mucho menos sabían de la existencia de su hijo, por lo que las palabras dichas por Dayron les habian sorprendido bastante.
Dos días después de lo sucedido en Mandrágora los cadáveres y los heridos seguían siendo encontrados entre los restos y escombros de la batalla, sin embargo seguía sin haber noticia alguna de Hasuka, tal parecía que se había hecho añicos en la colisión.
Mientras Arturo buscaba entre los recién llegados a la enfermería a Hasuka, Ross se acercó a él para conversar.
- Arturo, de verdad lo siento pero no habríamos salido con vida si no hubiera hecho lo que hice.
- Callate, no te golpeo sólo porque no estamos en condiciones.
Pero escucha bien, nunca te perdonaré que me hayas salvado, habría preferido morir a que me volvieran a salvar a costa de alguien más.
- Pero Arturo...
- ¡Que te calles! Si no fuera por ti, quizá la habría podido salvar. Solo eres un idiota que se cree el héroe. - Ross se quedó callado con la cabeza mirando al suelo. - en primer lugar, ¿para que te enlistaste en el ejército? ¿Te gusta ser un héroe que lucha por la justicia?
Eres idiota si crees que los héroes pueden sobrevivir en la guerra.
Arturo comenzó a caminar pero en ese momento Ross respondió a su pregunta.
-Mis padres no me criaron juntos, mi padre murió por una enfermedad en el corazón cuando yo tenía 5 años, y dejó a mi madre, a mi hermano y a mí.
En aquel entonces yo me fui a trabajar de leñador con mi abuelo, y mi madre y mi hermano pequeño tuvieron que quedarse solos mientras yo trabajaba.
- ¿A caso crees que me interesa realmente?
- durante los primeros ataque que hicieron los elementales antes de iniciar la guerra mi madre y mi hermano fueron asesinados. - Arturo guardó silencio pero no volteo a ver a Ross. - en ese entonces decidí que sería militar.
Hace 9 meses cuando la guerra entre ambas razas comenzó decidí que me enlistaria para vengar a mi madre y mi hermano.
- Si crees que por una historia triste voy a olvidar todo estás muy equivocado.
Arturo siguió caminando sin voltear atrás. Sabía que lo que Ross le había dicho debía ser la verdad, y a diferencia de él, Arturo se había enlistado en el ejercito morfologo sólo porque su padre y él tenían problemas, lo había hecho como una salida, además de que creía que con sus habilidades sería un soldado sin igual, pues nadie de su familia se encontraba en el ejército, lo que significaba que Solo él tendría una habilidad tan increíble como lo era poder teletransportarse.
Pero la guerra le había hecho ver que no importaba si su habilidad era excepcional, siempre hay alguien mejor. A pesar de ser tan veloz, fuerte o inteligente comparado con lo que había visto y vivido hasta ahora, Arturo sentía que no era nada, y además lo habían salvado dos veces de la muerte, no solo era una deuda enorme la que sentía que tenía con Hasuka y  ahora también con Ross, sino que además se sentía culpable por ser "débil" y no poder salvarse ni siquiera el mismo.
Hasta aquí el capitulo de está semana.
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lunes, 8 de octubre de 2018

Rasgos de sangre

                     Capítulo 9.-
                El rescate de  Chibiko.

- Como saben la misión es únicamente rescatar a Chibiko, si es posible tomar la ciudad lo haremos pero si no es posible  simplemente nos retiraremos con Chibiko a salvo.
Todos en formación, esos elementales se han burlado bastante del ejército morfologo, tomando ciudades y prisioneros. Pero se acabó, es momento de devolverles el favor. Entraremos en su base central y los haremos pagar por su ofensa. Es hora de comenzar con la misión.
Con estas palabras de Holow todo el pelotón se movilizó y comenzó el ataque.
En un instante penetraron en la base enemiga, y comenzaron la batalla contra los soldados de guardia.
Aunque los elementales de guardia no eran soldados del todo débiles, el pelotón estaba conformado por muchos altos mandos, y no fue difícil doblegar las defensas iniciales de la ciudad. Sin embargo mientras más se adentraban en la base más difícil era abrirse paso.
Pronto llegaron los refuerzos elementales. Y Waldrius (mejor conocido como géiser por el ejército morfologo) fue el primero en frenar el avance de los morfologos, con un solo ataque consiguió acabar con 20 soldados morfologos. Y ese sólo era el inicio de sus problemas pues los dos generales que se encontraban en la base venían con más soldados para apoyar a la batalla.
- Como se esperaba. Reaccionaron rápido al ataque. - dijo Tomyer mientras se preparaba para entrar en batalla directa.
Mientras todo esto se gestaba un equipo especial conformado por una división de 20 espías y 30 soldados del CDPE (comando de proximidad de elite), habían rodeado la base para entrar desde atrás, con la finalidad de buscar y rescatar a Chibiko.
Entre los soldados se encontraban Ross, Hasuka, Giannina, Arturo, y Holow comandando la operación.
Lograron penetrar en la base y se encontraron con un grupo que resguardaba la base. Era un equipo medico con algunos soldados resguardando el área.
De inmediato comenzaron el ataque.
Los soldados elementales que se encontraban en la retaguardia estaban siendo aniquilados a una velocidad increíble, pues al ser en su mayoría del equipo medico aunque eran soldados talentosos poco lograban contra los soldados acorazados del CDPE y la velocidad de los morfologos de la división de Espionaje.
En las lineas del frente el cuarto general morfologo Tomyer libraba una dura batalla junto a sus soldados.
Waldrius (géiser) estaba causando  muchas bajas y el sexto General Graant además del 5 general shoen se encontraba también entre las filas enemigas.
La habilidad morfologa de Tomyer agudizaba sus reflejos, pues su cerebro reaccionaba instantáneamente ante cualquier situación, volviéndolo tan velos que nadie en el ejército morfologo (ni siquiera Chibiko que puede moverse a la velocidad del sonido dentro de su neblina), podía igualarle. No importaba si estabas seguro de que acertarías, tan pronto como Tomyer viera que te movías un poco, o se sintiera amenazado por algún ataque este se movería incluso antes de que el ataque se terminara de gestar.
Gracias a que Tomyer era un experto combatiente había adquirido la capacidad de prever los movimientos corporales con un ligero cambio en la postura del cuerpo.
Por tal motivo Géiser y Graant no eran más que moscas para él, en cuanto a velocidad.
Sin embargo aunque Waldrius no era capaz de darle batalla a Tomyer, Graant y Shoen si que podían ser un problema, pues lo que les faltaba en velocidad les sobraba en poder.
Graant al tener la capacidad de cambiar la estructura molecular de la materia y transformar a su antojo lo sólido en liquido o gas y viceversa, era un oponente digno de temer, mientras que Shoen era elemental de viento, y podía creas fuertes ventiscas e incluso tornados.
En la retaguardia elemental, Holow y el equipo de rescate casi habían aniquilado por completo al equipo medico y de vigilancia que ahí se encontraba. Por lo que comenzaron a darse a la tarea de interrogar a los soldados que aún estaban vivos para dar con la ubicación de Chibiko. Aunque ningún soldado elemental dio información, uno de ellos desveló el camino inconscientemente al voltear a ver hacia una puerta hecha de corteza de árbol, justo cuando le preguntaron sobre donde se encontraba el prisionero.
Ross se apresuró a abrir la puerta, pero un elemental bestia obstruyó su camino, y comenzó a atacarlo con todo lo que tenía.
Después de que habían descubierto donde tenían encerrado a Chibiko, todos los soldados elementales se reunieron frente a la puerta pata evitar que liberaran al prisionero.
La batalla se intensificó de pronto, era como si permitir que liberarán a Chibiko fuera peor que morir para los elementales.
Arturo tomó la iniciativa y se transportó detras de aquella puerta. Dentro del lugar encontró a Chibiko atrapado entre raíces de árbol tan gruesas que una espada apenas lograría hacerles un rasguño.
Era obvio que Wood había creado personalmente la celda de Chibiko.
Holow entró por la fuerza sin importarle los ataques enemigos, pues gracias a su dura piel no había ningún arma que le pudiera hacer daño grave.
Al entrar y ver a Chibiko atrapado entre las gruesas raíces supo de inmediato que el rescate demoraría más de lo planeado.
Corrió hacia donde estaba Chibiko y con todas sus fuerzas golpeó con su mano las enormes raíces, pero su golpe a pesar de lo dura que era su piel no le hizo nada a la madera, y contrario de ello, terminó por fracturar su muñeca por el impacto.
Ross consiguió a duras penas acabar con el elemental bestia, y de inmediato se dirigió a auxiliar a Giannina que se encontraba combatiendo con un elemental de agua, el cuál estaba a punto de ahogarla usando su habilidad.
Creó una esfera de agua en la que la atrapó. Ross aligeró su cuerpo tanto como pudo y saltó con fuerza para llegar más rápido, y de inmediato comenzó a combatir contra dicho elemental.
Ross sabia que tenía poco tiempo antes de que el agua ahogara a su compañera, pero para su suerte el elemental perdió la concentración sobre su habilidad y la esfera de agua se vino abajo, permitiendo que Giannina sobreviviera, aunque se encontraba en Shock por la falta de oxígeno y además había. Tragado mucha agua.
Finalmente usando su habilidad, Ross logró acabar con su combate.
Y no tardaron más en doblegar a los elementales restantes.
Entraron todos en el lugar donde se encontraba Chibiko, y al verlo quedaron sorprendidos. Estaba demasiado delgado y no se veía para nada cómo el Chibiko que habían conocido. Sus ojos estaban hundidos en sus cuencas y sus antes fornidos brazos ahora eran tan delgados como una rama de una pequeña planta.
Apenas podía pronunciar palabra, tenía golpes en el rostro, y parecía tener la mandíbula dislocada pues se notaba que le dolía al hablar y se le dificultaba cerrar la boca.
Arturo estaba golpeando las raíces con su espada con tanta fuerza como le era posible, pero apenas había logrado hacer una muesca en la madera.
Ross se acercó a Chibiko y lo miró aterrado por las condiciones en que se encontraba.
- Lo sacaremos de aquí comandante.
Tomo firmemente su espada, la subió y la bajó con todas sus fuerzas y volviendo todo su cuerpo pesado usando su habilidad morfologa ( cambio de peso, ligero o pesado según lo quiera). Logró penetrar en las gruesas raíces unos cuantos centímetros, pero su espada quedó atorada entre la madera y se terminó partiendo.
Al ver esto, Holow y Arturo quedaron sorprendidos, pues ellos no habían logrado hacer daño a la gruesa madera.
- Sargento Ross, ¿cree que pueda repetir lo que acaba de lograr? - preguntó Holow.
- Claro que si coronel.
Holow le extendió su espada y Ross volvió a repetir el procedimiento, esta vez intentó golpear el mismo lugar que había logrado penetrar pero fallo por poco, aunque consiguiendo el mismo resultado de antes. Al ver esto, Arturo no dudó en darle su espada a Ross también, y está vez un pedazo de madera salió volando por completo y la espada no se partió, Ross volvió a golpear la madera con el filo de la espada y la atravesó casi por completo pero finalmente el acero cedió y se partió también.
Holow volvió a golpear la madera, esta vez con su antebrazo, y sobre el lugar que ya había sido casi partido por completo.
Logró romper por completo la raíz, gracias a su dura piel era como golpear la raíz con una roca, sin embargo su brazo también sufrió el impacto, y terminó por fracturarse al igual que había pasado con su muñeca (que era del mismo brazo) esto dejó inmóvil por completo el brazo de Holow.
- Saquenlo de ahí, es hora de irnos. - ordeno Holow.
Todos los soldados se apresuraron a cumplir la orden, y sacaron a Chibiko.
El encargado de dar la noticia de que la misión había sido un éxito era Arturo, de modo que se transportó  al frente de batalla.
Al llegar encontró un caos, los generales enemigos estaban haciendo estragos en el ejército morfologo, y Tomyer se encontraba en combate directo contra ambos generales. Debido a que no logró comunicarle la noticia a Tomyer, regresó a la retaguardia con Holow.
- ¡Coronel! El general Tomyer se encuentra en un intenso combate, me fue imposible darle a conocer el estado de la misión.
- Tendremos que apoyarlos desde la retaguardia. Quizá sea mejor así, puede que incluso logremos sacar ventaja de la situación. Pero debemos sacar a Chibiko de aquí ahora.
- Coronel Holow, si me lo permite quisiera apoyar. Me niego a retirarme.
- En sus condiciones dudo que pueda si quiera levantar una espada.
- Pero puedo pelear con un par de cuchillos. - Chibiko tomó dos cuchillos de los soldados elementales muertos. - por favor Coronel, mi habilidad les será muy útil para tomar por sorpresa al enemigo. Déjeme combatir.
En el frente de batalla, Hasuka estaba librando un combate contra géiser. Impulsada por la venganza y el rencor de la muerte de Butter, se lanzó sin pensarlo contra este capitán enemigo.
La habilidad de géiser era muy superior a la de Hasuka, en un principio Hasuka sintió que el combate era muy parejo, pero tan pronto como Waldrius  se puso serio las cosas comenzaron a cambiar.
Hasuka tuvo un descuido y la espada de Waldrios atravesó su armadura, está cayó irremediablemente al suelo por el dolor, pero cuando Waldrius quiso dar el golpe final Hasuka se incorporó de nuevo y lo atacó sorpresivamente, utilizando su cuchillo de combate, y aunque ese estilo de pelea no era muy propio de ella logró sorprender a géiser quien apenas escapó convirtiendo su cuerpo en agua para evadir el ataque.
Aunque la habilidad de Hasuka (regeneración) requería unos minutos para cellar las heridas, era capaz de detener la hemorragia casi instantáneamente para evitar la perdida de sangre, esto le ayudaba bastante pues una herida por grave que está fuera (siempre y cuando no fuera a la cabeza) no la mataba al instante, incluso una herida en el corazón podía ser curada con su habilidad.
Tomyer por su parte se encontraba evadiendo los ataques de los dos generales, a la vez que buscaba una oportunidad para atacar, pero debido al poder de  los generales elementales, dicha oportunidad parecía imposible, si intentaba acercarse por tierra Graant la volvía fango, y si lo intentaba dando un salto, Shoen creaba ventiscas tan fuertes que lo lanzaban de nuevo hacia atrás. Por tal motivo solo podía evadir los ataque en lugar de intentar atacar.
Y para empeorar las cosas, Wood se encontraba cerca, pues regresaba de la batalla que había tenido con Dayron.
Pero de entre las filas enemigas, desde la retaguardia una habilidad familiar y que sembraba la preocupación en los generales se hacia presente.
El campo se comenzaba a cubrir poco a poco de neblina obscura dejando la visibilidad casi nula.
Los choques de espadas y los gritos de los soldados se escuchaban entre la obscuridad de la neblina.
- ¡Maldicion, Chibiko escapó! - gritó Graant.
Waldrius al ver aquella escena supo que la posibilidad de ser derrotados en su propio terreno era mucha, así que rápidamente terminó su combate con Hasuka, la atravesó con su sable y lanzó un ataque que le voló el brazo izquierdo. De inmediato corrió hasta donde estaban los generales.
- ¡General Shoen! Debemos evacuar el pueblo. - El general elemental lo vio con asombro. - El general Wood debió regresar hace dos días, y sin embargo aún no está aquí, es posible que haya sido derrotado, debemos comenzar la evacuación o los civiles estarán en problemas.
Shoen aceptó la petición de Waldrius, y esté se marchó junto a un pequeño grupo para evacuar la ciudad de Mandrágora.
Tomyer aprovechó la distracción y atacó a Shoen, logrando herirlo gravemente, pues su espada atravesó su brazo que se interpuso. Pero la batalla aun seguía y Shoen usó su mejor movimiento.
Creó un enorme tornado usando las corrientes de aire a su favor, pues el clima era cálido y el aire caliente que se mezcló con sus ventiscas frías, solo había un problema; una vez que el tornado se formaba estaba fuera de control pues ya no dependía de la habilidad de Shoen controlarlo.
El gigantesco tornado arrasó con muchos soldados de ambos bandos, y creó un completo caos. Las fuertes corrientes de viento que el monstruo de aire generaba limpiaron la neblina de Chibiko, dejando ver un puñado de muertos y heridos elementales.
Todos comenzaron a correr para cubrirse de aquel tornado. Los soldados  heridos eran arrastrados al tornado irremediablemente. Era una verdadera masacre.
Chibiko apenas podía mantenerse en pié, por lo que Ross lo cargó para llevarlo a un lugar seguro, todos se alejaron lo más que pudieron para evitar ser succionados por el gigantesco tornado.
Waldrius al ver la situación apresuró la evacuación, era la primera vez que el general Shoen usaba un ataque tan devastador cerca de los civiles elementales, era más que obvio que la batalla se había salido de control.
Hasta aquí termina el capítulo de está semana.
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